Ya han pasado 491 años desde que Martín Lutero clavó las 95 tesis en la catedral de Wittenberg, hecho que es considerado el punta pie de la reforma.
En uno de sus viajes a Roma, Lutero se da cuenta de cómo la iglesia católica cobraba por las indulgencias. Una indulgencia era la remisión (parcial o total) del castigo temporal por los pecados, es decir, cuando la gente pecaba iba y pagaba una cantidad de dinero y su pecado era olvidado. Esa era la forma como la iglesia decía a la gente que era justificada ante Dios.
Lutero, estudiando la Biblia, se dio cuenta que la forma de ser justificado no descansaba en ninguna obra que el hombre pudiera hacer sino que en la fe, que era un regalo de Dios.
Ahora nosotros no pagamos indulgencias, pero muchas veces creemos que Dios nos ve más justos según nuestras obras, según los méritos que nosotros podamos tener, pero Pablo nos enseña que nuestra justificación se basa sólo en los méritos de Cristo, nada se puede añadir a eso.
Lutero se dio cuenta de esto, tal como Calvino, en la lectura de la epístola de Pablo a la iglesia cristiana en Roma. De este epístola vamos a estudiar un pequeño pasaje que está en Romanos 4:23 – 5:5.
Seguir leyendo →
Me gusta esto:
Me gusta Cargando...
28 junio, 2009
Categorías: Nuestras Predicaciones . Etiquetas: justificación . Autor: Marcelo Sánchez Ávila . Comments: 2 comentarios