Ayer comenzamos una corta serie que habla de los credos y confesiones del cristianismo, es una breve historia de ellos hecha por A. A. Hodge.
En esta ocación el texto habla de los credos universales del cristianismo, nos da un poco de información sobre cada uno de ellos y nos explica en que circunstancias fueron creados
Los credos antiguos que expresan la fe común de toda la iglesia
A. A. Hodge
Son pocos los Credos que se formaron antes del tiempo de la Reforma y se refieren a los principios fundamentales del cristianismo, especialmente a la Trinidad y a la persona del Dios Hombre y son la herencia de toda la Iglesia.
Este no fue escrito por los Apóstoles sino que se fue formando gradualmente por un consentimiento común, fundándose en las varias confesiones que separadamente habían adoptado las congregaciones particulares y que usaban en la recepción de sus miembros. Adquirió su forma actual y el uso entre todas las iglesias, afines del siglo segundo. Fue puesto al fin del Catecismo Menor juntamente con la Oración del Señor y los Diez mandamientos en la primera edición publicada por orden del parlamento, «no porque se creyera que había sido compuesto por los Apóstoles, o porque debiera considerarse como escritura canónica… sino por ser un breve resumen de la fe cristiana, de acuerdo con la Palabra de Dios, y recibido antiguamente en as iglesias de Cristo.»
Este fue formado sobre las bases de los Apóstoles, y la cláusula relativa a la divinidad sustancial de Cristo, fue agregada por el Gran Concilio celebrado en Nicea, Bitinia, 325 a.C., y las que se refieren a la divinidad y personalidad del Espíritu Santo, las añadió el segundo Concilio Ecuménico reunido en Constantinopla, 381 a.C., y la cláusula «filioque» (quiere decir: y del Hijo) la añadió el Concilio de la Iglesia Occidental verificado en Toledo, (España) 589 a.C. En su forma actual es el Credo de toda la Iglesia Cristiana; la Iglesia Griega sólo rechaza la última cláusula mencionada. Dicho credo es como sigue:
«Creo en un solo Dios Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra, y de todas las cosas visibles e invisibles;
Y en un solo Señor Jesucristo, Hijo Unigénito de Dios,
Engendrado del Padre antes de todos los siglos,
Dios de Dios, Luz de Luz, verdadero Dios de Dios verdadero,
Engendrado, no hecho, consubstancial con el Padre;
Por el cual todas las cosas fueron hechas,
El cual por amor de nosotros y por nuestra salud descendió del cielo,
Y tomando nuestra carne de la virgen María, por el espíritu Santo, fue hecho hombre,
Y fue crucificado por nosotros bajo el poder de Poncio Pilato,
Padeció, y fue sepultado;
Y al tercer día resucitó según las Escrituras,
Subió a los cielos y está sentado a la diestra de Dios Padre.
Y vendrá otra vez con gloria a jugar a los vivos y a los muertos;
Y su reino no tendrá fin.
Y creo en el Espíritu Santo, Señor y Dador de vida, procedente del Padre y del Hijo.
El cual con el Padre y el Hijo juntamente es adorado y glorificado;
Quien habló por los profetas,
Y creo en una santa Iglesia Católica Apostólica.
Confieso un bautismo para remisión de pecados,
Y espero la resurrección de los muertos,
Y la vida del siglo venidero. Amén.»
En el transcurso del tiempo brotaron en el seno de la iglesia opiniones heréticas respecto a la constitución de la persona de Cristo.
Por esta razón la iglesia se vio forzada a proveer definiciones adicionales que sirvieran de defensa a la verdad. Una tendencia herética se desarrolló hasta el extremo en el Nestorianismo que sostenía que las naturalezas divina y humana de Cristo, constituían dos personas. Esto fue condenado por el Concilio de Éfeso 431 d. C. La tendencia herética opuesta llegó a su colmo en el Eutiquianismo, que sostenía que las naturalezas divina y humana de Cristo, estaban unidas de tal manera que no eran sino una sola. Estas herejías las condenó el Concilio de Calcedonia, 451 d. C. Estos Credos que sostienen que Cristo tiene dos naturalezas en una persona, definen la fe de la Iglesia y son recibidos y aprobados por ella.
Evidentemente éste fue compuesto mucho tiempo después de la muerte del gran teólogo cuyo nombre lleva, cuando, concluyendo las controversias, fueron establecidas las definiciones de los Concilios de Éfeso y Calcedonia ya mencionados arriba. Es un gran monumento, único de la fe inmutable de la Iglesia en lo que se refiere a los grandes misterios de la piedad, de la Trinidad de personas en un solo Dios, y de la dualidad de naturalezas en la persona de Cristo.
7 comentarios
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GRACIA HERMANOS, CON EL PERMISO DE USTEDES DARE LECTURA DE ESTE ESCRITO EL DIA DOMINGO EN LA IGLESIA DADO A QUE ESTAREMOS CELEBRANDO EL DIA DE LA BIBLIA Y DE LA REFORMA PROTESTANTE. QUE EL DIOS DE TODA GRACIA LOS CONTINUE UTILIZANDO PARA SU GLORIA.
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ahora ya también tienen su día festivo la biblia y la reforma protestante, porque no solo predican a Cristo y la vida que hay en Él, no dice la palabra que Él es suficiente en todo y para todo?
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Yo creo en la biblia como única regla de fe y maxima autoridad en la vida del cristiano, creo en los escritos antiguos de los profetas, creo en los echos de los apostoles de Cristo, creo en CRISTO, Y DECLARO Y CONFIESO QUE LA BiBLIA ES UN LIBRO MARAVILLOSO E INFALIBLE ES LA PALABRA DE DIOS ESCRITA. la biblia es mi fundamento y no necesito fundamentarme en ningun credo formado por los hombres religiosos y ecumenocos de catolicismo romano, yo se que mi DIOS es trino porque la biblia realmente asi me lo describe aunque no con esas palabras. no me interesan en lo mas minimo los credos de NICENO, SAN ATANASIO, CALCEDONIO, NINGUNO ESO NO ES PARA LOS EVANGELICOS Y Y NO CREO QUE SEAN NECESARIOS ESARIOS SI MI BUEN DIOS
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Hola Rafael. Me parece muy contradictorio tu mensaje. De hecho comienzas afirmando cual es tu credo (aunque creo que es sólo parte de él). Credo significa simplemente «yo creo» y así comienza tu mensaje.
En segundo lugar, mi fundamento, ni el de ningún protestante, no son los credos sino la Escritura. De hecho solamente afirmamos los credos que están de acuerdo con la Escritura.
En tercer lugar, afirmas que los credos fueron compuestos por teólogos ecuménicos y romanos, lo que no es cierto. Ellos existen desde antes que la Iglesia fuera romana.
Te recomiendo que leas estos post para que entiendas qué son los credos y porque los afirmamos:
https://reformadoreformandome.wordpress.com/2013/03/15/1375/
https://reformadoreformandome.wordpress.com/2013/04/12/carl-trueman/
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Creo en el valor de tener credos que ayuden a recordar las verdades fundamentales, pero para eso tenemos la Biblia. EL verdadero valor de los credos estaba en los primeros siglos donde la Biblia no estaba publicada y los creyentes no poseian copias, por lo cual una forma oral servia para ayudar a los cristianos recordar sus creencias especialmente frente a voces erejes que resonaban en aquellos tiempos. La unica escritura disponible y a muy pocos y eso entre gente pudiente, era el Antigua Testamento. En los 1600’s se invento la imprenta y la Biblia fue el primer libro publicado. Contodo seria unos cien anos mas antes que se pudiera imprimir suficientes biblias para todo el publico. Aunque soy de base evangelica, no catolica ni protestante, creo que hasta estos ultimos tres siglos, el credo tenia un lugar vigente e importante en las iglesias cristianas.
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Eduardo, te recomiendo estos artículos donde se habla un poco más sobre el tema de los credos:
https://reformadoreformandome.wordpress.com/2013/04/12/carl-trueman/
https://reformadoreformandome.wordpress.com/2013/03/15/1375/
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Creer solamente en la Biblia como autoridad suprema e infalible y creer que la salvación es por fe en Cristo Jesús y no por obras es ser protestante. Sola Fide y Sola Scriptura son las 2 bases del verdadero protestantismo que es anti católico por esencia. Antes de la Reforma no había Biblias para el pueblo; es la Reforma que dio la Escritura al pueblo. Sin protestantismo la Biblia habria quedado prohibida por el papado como lo decretó Inocencio III (1198-1216). Eduardo, tienes que estudiar un poco la historia pues como dice la Escritura : «Mi pueblo pereció por falta de conocimiento»
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